AUN TENEMOS TIEMPO VENEZUELA !ARRIBA¡
En días recientes hemos sido testigos de la arremetida feroz a los medios de comunicación. Prensa, radio y televisión; ataque terrorista por hordas afectas al gobierno a un popular canal de televisión de noticias. La clausura de treinta y cuatro emisoras de radio sin darles las más minima oportunidad de defensa además en fin de semana haciéndoles la notificación en horas en las que no se podía activar alguna defensa. Estas emisoras de radio en su mayoría con alta cuota de aceptación en la preferencia de las comunidades por ser zonas altamente pobladas y que precisamente por ser una considerable masa trabajadora, a tempranas horas de la mañana encendían sus radios para escuchar en la emisora de su preferencia las noticias de esas horas y las informaciones en general dirigidas a la gran comunidad nacional. Yendo al fondo de la cuestión no es válida la argumentación del régimen cuando dice a través de sus voceros que estas medidas son para democratizar el espectro radioeléctrico. La presunta ilegalidad pasa según esta premisa manejada por ellos que se estaba usurpando espacio en el precitado espectro al no tener en regla la permisología para la explotación y tantos otros argumentos más peregrinos todavía. Se sabe que en su mayoría estas radioemisoras por medio de sus propietarios, apoderados, herederos entre otros tienen años solicitando ante el organismo encargado de regular el uso del espectro eléctrico sin obtener respuesta alguna por parte del mismo. La respuesta final ha sido una emboscada dando esta por resultado las primeras treinta y cuatro de ellas defenestradas del espacio radioeléctrico. Entonces estamos claros que lo que se ha producido es un golpe fáctico contra la libertad de expresión negándonos el derecho que tenemos todos los ciudadanos de este país a estar informados del acontecer nacional por el medio comunicacional de nuestra preferencia, sin color político, sin cortapisas. Con lo acontecido en estos días lo que se pretende o mejor dicho lo que pretende el régimen es execrar del espectro radioeléctrico a todo aquel medio que contribuya a difundir la información objetiva, las ideas en todo su contexto, sin censura; dejándole al ciudadano que en razón de su libre albedrío escoja lo que más cercano este a sus preferencias, a su formación y a su espíritu Nosotros no podemos permitir que los gobiernos de turno pretendan monopolizar el espectro radioeléctrico para su uso propagandístico por medios afectos a ellos que tratan de ideologisarnos a través de su red de información monocromática, tratando a su vez de imponer un férreo freno a la disidencia para que fluya libremente su pensamiento ideológico desfasado y perverso.
