lunes, 23 de enero de 2012

La ignorancia de la ciudadania


En los tiempos que corren y en los anteriores, se le ha hecho una crítica generalizada en la que se le endilga a la democracia una presunta ignorancia de los ciudadanos que tiene que ver con los aspectos políticos, sociales y económicos, pilares fundamentales en nuestras sociedades que los limita para escoger entre diferentes propuestas.

Presunción de ignorancia
La presunción de esta ignorancia englobada en un sistema llamado oclocracia(1), que conllevaría a que las decisiones tomadas por la gente fueran equivocadas en determinados casos, al no estar basadas en conocimientos técnicos. No obstante los que defienden la democracia esgrimen que la ciudadanía no sufre de tal ignorancia, y que esta argumentación la ejercen interesadamente, las clases poderosas, de imponer la tecnocracia y el autoritarismo a las preferencias de la gente.
 

Argumentación de la clase política
 

También la clase política hace suyo este argumento, descalificando los resultados de referendos y las elecciones legítimas y también en estadios en los que se exponen reformas para ir en busca de una mayor hondura hacia otras formas de democracia más directas  o participativas que la democracia representativa. Es más; puede ser que la clase política sea la que promueva, la ignorancia de los ciudadanos, en busca de lograr objetivos personales. Sin embargo para evitar esta circunstancia se han implementado leyes que obligan a los gobiernos a dedicar parte de sus recursos para proporcionarle información a la gente mediante boletines oficiales.
Además de informar sobre nuevas leyes, sobre decisiones oficiales, publicación de las sentencias judiciales oficiales o en su defecto mediante la implementación de campañas a la población antes de realizar un referendo, o cualquier tema de interés de la población civil en general. En todo caso; generalmente en todas las sociedades en las que se posibilita el debate público es universalmente aceptado que la democracia es con mucho, el menos malo de los sistemas políticos. Y puesto que ha sido electa por esta, se asume la aceptación del gobierno por parte del pueblo.

Los pueblos tienen derecho a equivocarse

Desde los comienzo de la democracia se ha tomado en consideración que todo pueblo tiene derecho a equivocarse y por supuesto es mejor cuando ese error se asume como propio por la sociedad, como contraparte a cuando esta culpa es de unas pocas personas expertas, que es presumible a pesar de todo equivocarse, y existe la posibilidad de actuar según intereses políticos extraños a la mayoría de la gente. Es válido argumentar que esta presunta ignorancia podría traducirse para las elecciones en abstención, pero tal vez sea poco probable que tenga una importancia manifiesta en la toma de decisiones.

Tendencia de las izquierdas

Sin embargo esto no es cierto en los países en que todos los ciudadanos, están obligados a votar, aquí la ignorancia, si juega un papel de primer orden. Debemos acotar que varias tendencias de izquierda, acostumbran pujar por la abstención electoral, ya que observan en el voto como una acción mentirosa para el pueblo.
Haciendo un balance cuantitativo del grado de ignorancia popular por la acción de la abstención, se considera en sí que esta recoge tanto los votos de quienes se proclaman ignorantes de temas políticos (apolíticos) como aquellos a quienes no les llena el sistema y/o ninguno de los candidatos o partidos que se presentan, por lo que es bastante complicado discernir la abstención por solo ignorancia o abstención contestataria.

Tiranía de la mayoría

Existe una regla en democracia llamada de la mayoría, que es capaz de producir un efecto negativo conocido como la tiranía de la mayoría. Este efecto hace alusión a que en un sistema democrático, una mayoría de personas pueden en teoría perjudicar o de hecho oprimir a una minoría en particular. Esto representa una negatividad desde el punto de vista de la democracia, pues habla de que la ciudadanía como un todo tenga un mayor poder.
Podemos explayarnos en exponer casos  en que la llamada mayoría en democracia, se transforma en tiranía de la mayoría: el caso de las minorías indígenas, los homosexuales, los drogadictos, los ricos y tantas otras. Los que defienden la democracia desglosan una serie de argumentos, como defensa a todo esto. Tal vez la más importante es que la presencia de una constitución, debería actuar de salvaguarda ante la posible tiranía de la mayoría. En términos generales para cambiar una constitución, se requiere de una mayoría cualificada de representantes, o en su defecto que el poder judicial avale dichos cambios, o algunas veces en referendo y/o una combinación de estas medidas.

Lo importante de la separación de poderes

Es posible también que habiendo separación de poderes a saber: legislativo, ejecutivo, judicial. Podría ser posible que una mayoría poco unánime imponga su voluntad. Pero aún con todo y esto, una mayoría, es posible que discrimine a una minoría, sin descartar con esto que ya sería una minoría más pequeña, pero por supuesto éticamente cuestionable. 

 1oclocracia o gobierno de la muchedumbre

facebook.com/german.agraz

german-agraz.suite101.net

artigoo.com/usuario/gerag/